lunes, 25 de abril de 2011

Mi hermano Moi


Está claro que sin la ayuda de mi hermano lo del otro día no podría haberlo hecho. Me acompañó todo el camino dándome, comida y agua. Preparándome el agua con las sales, dándome geles, plátanos, naranjas, etc. Me dió conversación, compañía y ánimo.

Le dije que cada media hora quería comer y beber y se las ingenió para que así fuera aunque tuviera que matarse en las subidas tirando del pesado carro que llevábamos o dándole el gel y el agua a un coche que pasaba porque veía que llegaba la hora y no me alcanzaba.

Sudando para arriba y pasando frío para abajo. Contestando al teléfono a todos los que llamaban para ver cómo íbamos. Y aunque el ritmo no fuera muy alto, son casi 7 horas encima de la bici, y eso para alguien que no coge la bici casi nunca es duro. Sobretodo para su culo.


Por todo eso, por estar siempre ahí, por nunca decir que no a nada, ¡gracias hermano!

Lo que más me a sorprendido de todo ha sido mi recuperación. El viernes tenía las piernas algo tocadas, no voy a negarlo, pero mucho menos de lo esperado. Podía andar y bajar escaleras con normalidad. Y el sábado ya estaba totalmente recuperado y con ganas de volver a correr.

Así que el domingo por la mañana quedé otra vez con Moi y nos fuimos al Llano de la Perdiz para correr 2 horas por el monte. Volviendo nos paramos en este sitio y un japonés que estaba haciendo fotos nos hizo esta, con la Alhambra y Granada al fondo. Mi hermano está preparando una dura carrera para el domingo próximo, el 1 de mayo. Esta vez me tocará a mí darle apoyo desde fuera.


Esta se la hice yo en la subida.

Y esta mañana, ya de vuelta en Almería, he ido a la piscina. Llevaba sin nadar desde hace 10 días, y al principio me ha costado bastante. Iba sin fuerza, sin deslizar, sin posición, etc. A partir de los 1500m la cosa ha cambiado y me he encontrado mucho mejor. En total 3000m.

Ya queda menos de un mes para Lanzarote. Los participantes ya van ultimando su preparaciónfísica y mental. Sobretodo mental. A través de mi amigo Antonio el pejigueras, di con este blog y me encantó esta entrada que se titula Humildad:

"Llegó el momento, para muchos de nosotros. El momento de la humildad.

De darnos cuenta que sintiéndonos pequeños, podremos llegar a ser grandes.

De sentir que somos dramáticamente frágiles; Pero llenos de fuerza a la vez.

De que sólo respetando las distancias, se nos otorgará la meta.

De que tan solo viendo cada día amanecer y pedaleando rayando el ocaso seremos dignos de culminar los 226 kms.

Esforzarnos. Ser humanos. Amar la libertad, el esfuerzo y soñar con ser mejores. Terminar con el sol torturándonos, ó tal vez antes de que anochezca... quizás un poco antes de que el reloj agote las 17 horas; de cualquier manera seremos dignos si lo sentimos genuino, intransferible, nuestro.

Humildad, orgullo, fe en nosotros. Ya queda menos.

Puerto del Carmen, allá vamos!"

2 comentarios:

  1. Grande, Santi. Enhorabuena!!A Pablo Cabeza lo conocí en Talavera de la Reina sin saber lo grande que es en el triatlón español. La humildad es requisito indispensable en nuestra "carrera"...SALUD!!

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  2. Qué poco te queda Antonio! ni siquiera se si podrás leer esto.
    !Mucha suerte para el domingo!

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