viernes, 11 de marzo de 2011

Instintos asesinos

No tanto pero casi. Eso es lo que siento cuando voy con la bici por carretera y algún desgraciado en su sillón con ruedas me pasa casi rozando o adelanta invadiendo el carril contrario yendo yo de frente. Y si encima, además de pasarte rozando, te pita y protesta como si fueras estorbando, la mala leche que me entra no la he sentido nunca con nada. Tengo que aprender a controlarme en esos momentos y conseguir ignorarlos.

Hoy tampoco hacía muy buen día para salir con la bici. Sigue haciendo mucho viento y en algunos momentos ha caído agua, aunque en el rato que yo he estado no me ha caído casi nada. Yo pensaba que iba a abrirse el día, pero no ha sido así. Eso mismo han debido de pensar otros, porque me he cruzado con bastantes ciclistas. Todos por la misma carretera y cada uno a su bola.

He podido hacer 50 km de bici + 8 km de carrera seguidos, el tiempo justo para dejar la bici en el trastero, beberme lo que me quedaba de líquido y salir pitando. De piernas me he encontrado muy bien, lo único es que corriendo me notaba falto de alimento.
Cuando he llegado no he parado de comer hasta la hora de comer: almendras, jamón y fruta. Y para comer, pescaíto, arroz y salmorejo, que aún me queda.

Mañana descanso. Me llevo a las niñas a la piscina.

2 comentarios:

  1. Totalmente deacuerdo contigo Santi, parecemos un iman hacia los vehiculos, no se separan ni un centimetro...y sobre todo la hipocresia de pitarte y sacarte el dedo...... si te sirve de consuelo yo si me desahogado con alguno y lo he pasado bien.... aparte de su correspondiente receta que no sabra ni de donde le ha venido....... que lo sepasss......

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  2. Hola Jose Antonio! Al principio no caía en quién eras...pero lo de la receta me dió la pista. la próxima vez que alguno me haga una trastada te lo diré...

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